suerteSirena

he escrito sobre ella antes, pero nunca como se lo merece. entonces, en medio de mi propio drama familiar, me tomó de sorpresa que la cuenta de FB de SuerteSirena, aka tatiana de la tierra, la gran femme papayona, como ella misma se autodenominara, estuviera activa y que, además, fuera su madre (en la foto de abajo, hace unos días, reunida con amigas de la tati, leyendo sus sucios poemas sobre papayonerías varias, en un homenaje en el quinto aniversario de su muerte), quien la mantuviera viva, y en FB... y hoy, al ver este mensaje y foto de su madre, otra vez de verdad me regocija.

porque mírenla, en la foto de arriba, joven, linda, ya casi dispuesta a lanzarse en picada sobre la mojigatería lesbicursi del tout mayami con su revista esto no tiene nombre, de donde rebotaría a la vida real (porque mayami es ficción plástica) a Buffalo, NY a El Paso, TX, a LA, CA y al resto del mundo cruel, con su fuerza arrolladora e imparable, maquillada, enjoyada, perfumada y vestida de cuanto color existe, hasta la muerte, a la cual estuvo condenada desde temprana edad --como todos--, pero por la constante enfermedad en su caso, la desafiaba a diario.

a tati la conocí a principios de los 90, en un apartamento del little haiti mayamense pobre y peligroso... SIGUE
... donde vivía con una cubana --también fallecida-- que hoy en día estuviera en transición de ser cubano. la cuban@ era mayor, rebuscadamente culta como suelen serlo los cuban@s, y muy machista, con su tati femme a retortero siempre en medio de una u otra explosión dramaemotiva. ese día de mayo la tati cumplía años y fui con un amigo a su fiesta. era reverbero de humanidad y calor al borde del mar, en demasía la musiquita cubana-colombiana y las fuentes de chicharritas de plátano y botellas de ron en una mesa bajo cientos de tintineantes cds colgando del techo con hilos multicolores y cojines de flores por todo el piso del apretado apartamento, donde una pared tenía un mural de una enorme mujer desnuda, sexo abierto y angelitos lamiéndolo. mirando aquello, levanté una ceja hacia mi amigo que ya se me alejaba, risueño, y la vi, acercándose a mí como fiera en celo, enorme y sonriente, envuelta en tules y collares de todo tipo. "bienvenida a la mariconería papayonera", me saludó, mirándome de arribabajo con la lujuria goteándole de la boquita inocentona. me reí con ganas ante el saludo, lo cual a ella le encantó. se me acercó y abrazándome casi me susurró: "lo que tú quieras cuando quieras". aquello solo logró hacerme reír más, a carcajadas profundas, lo que a tati enloqueció. "qué rico te ríes; me gustas mucho". así, con esas puyas, intenté hablar de literatura con ella, siempre rayando en el sexo. al irme, intercambiamos teléfonos. a pesar del acoso, que me resultaba halagador y cómico, me había caído estupendamente. era una mujer inteligente, valiente, fuerte, atrevida y dispuesta a lo que fuera. y eso era de admirar. a los pocos días me llamó para invitarme a ir a ver a albita en miami beach, recién llegada a miami y conocida solo por los colombianos que en esa ciudad residían. fui con ella y mi amigo, de chaperón. gozamos mucho la noche, y luego me contó sus ambiciones literarias de lanzar revistas lésbicas, y de un negocio de tours en burros para lesbianas, en las montañas colombianas, etc. 

al regresar a mi ciudad, la tati me llamaba a veces, siempre supurando ternura casi infantil en medio de su perenne propuesta de quererse acostar conmigo, asegurándome de que un día lo iba a lograr. me encantaba su rebelde osadía, salvaje. cuando ella y su cuban@ empezaron la escandalosa revista lésbica, esto no tiene nombre, me pidió colaborar y acepté. lo hice varias veces porque aunque dejaba mucho que desear, era un gran esfuerzo y logro, en el miami de esa época. aquello, claro, duró poco. al mismo tiempo trató de inclinar el grupo "Las salamandras del ambiente" a formar grupos políticos de lesbianas, concertando reuniones del tema que escandalizaban a las mayamensas, tan de vivir incomodamente en el closet, tan de "recógeme en la esquina que dice mami que tú tienes ojos de lesbiana", tan de comer mierda a granel y luego quedarse sin hacer ni el papel. en medio de todo eso, la tati y su cuban@ tronaron feo y con gran drama, y la colombiana se fue a otros limbos para alejarse del mal de mayami.  

así, durante años me escribía por email, o me llamaba atenta e interesada por mi escritura, mi vida. la de ella siempre aumentando el drama, el espectáculo, la escritura directa, sexual. soy una puta, me decía orgullosa y yo se lo aplaudía. nos vimos varias veces, coincidiendo en varios lugares y conferencias de casualidad. siempre me abrazaba y me decía "anda, ríete, que me sigues gustando". la última vez que la vi en miami beach, fuimos a desayunar. llevaba años en diálisis, pero seguía viviendo a todo tren, pura tati. caminando por la playa, me dijo "bella" muchas veces, con su jadeante acento colombiano, y yo mirándola, tierna y rosada, envuelta en tules y collares, le dije "eres tremenda cabrona, tan linda" y me dio la mano. así, las dos caminamos un rato, de la mano. meses después me mandó por FB un mensaje con una foto. "me estoy muriendo", había escrito debajo de la foto, que la mostraba tirada en una cama, envuelta en tules, sonriendo, sus ojitos brillantes. apenas días después, se fue flotando a la tierra, la que tanto amaba, ella, tatiana de la tierra. hermosa y cabrona, papayona, tremenda. por eso me alegra tanto que su madre, que la sobrevivió --a ella y su hermano-- aún la mantenga viva. porque se lo merece, porque ella era vida, en exceso, mucha vida.