1.14.2012

CubaSoldOUT


Los primeros seis meses de los viajes a Cuba que ofrece el tour

National Geographic´s Expedition Tour "Cuba: Discovering Its People and Culture"
(Experience Cuban culture the most authentic way possible--through its people.
Meet and engage with Cuban farmers, teachers, artists, veterans and more.)

están vendidos --yes, soldOUT y con lista de espera-- para este año 2012 que apenas comienza. 

Así es, en este año 53 de la gran mentira que ha marcado toda mi vida, en los aeropuertos de esa desinflada burbuja flotante que es la isla sin cartografía revolucionaria y menos disposición nacional a evolucionar, hay tremenda cola de pasajeros forasteros --y no tanto-- prestos a no perderse el último acto de la tragicomedia bongosera de la segunda mitad del siglo 20, ansiosos de ser parte de la conga del fin del baile que cerrará la deteriorada comparsa de disfraces en la que se ha convertido hoy la isla corcho casi en los primeros doce años del siglo 21.

Y lo entiendo, aunque me duela, lo entiendo. Casi. Ese deseo de ir, explorar, aunque sea desde un autocar con guía y traductor one-way: "Sí, compañero-señor-míster, claro que sí". El ansia de ver y tocar esa prohibida hembraisla casi museo... beberla, fumarla, olerla, fisgonearla como a una antigua amante. Es la impaciencia de ser átomo, ácaro, millonésima parte --aunque sea unos días, desde un hotel casi-de-lujo y una playa de casi blanca arena fina y casi mar de espuma, aunque esté cotaminado de semen, sudor y flujos intrusos-- de esa visión extraordinaria al extremo de la observación casi fálica de telescopio que se enfoca en la punta de la vagina tropical con su perenne tumorcito resonando entre sus cascabeleros ovarios que supuran humor --en todos los sentidos. Ser parte de su creciente fibroma encharcado de su propia nostalgia de lo que fue, de lo que pudo ser. Es desear sentir ese injertado cáncer bucal de tanta carcajada hueca por su miseria con rumba e incesante toque de cajón en medio de la cervix, palpar su desgarrado túnel útero casi solar pintoresco de paredes caídas, casi vía blanca sin muros casi carte blanche sin crédito. Es el ímpetu descontrolado de saciarse de su irresistible olor a cloaca sexual emanando de mujeres casi cuje con culos casi guanabanescos con su parto constante de niños güin casi de cobre y carbón sus ojos tirándose casi huesos en clavado desde el dienteperro del malecón a salpicar la fotoinstantánea digital del italiano, del francés, del inglés, del canadiense, del argentino, del español, del texano y del newyorkino mientras su bollobturador se abre y se cierra --zas-flash-clic-zas-clic-clic-clic-- a ritmo enloquecedor... anda dale, ve dale, cuba te espera mientras chapotea en el suelo el ron, ron, running dulce y añejo como la amargura nacional que recorre de punta a cabo su geografía maldita de hembra deseada y comprada, abusada, manoseada...

Porque es eso, ese deseo inmoral de ser parte del momento orgásmico del antes-del-fin que flota por todas partes y no acaba de ocurrir. Es el pecado gozoso del placer demorado, aplazado para luego dejarse ir, escaparse, farfullar perdón en galimatías morales al volver con tabacos, ron y chupones en el cuello para decirles a los amigos de la universidad, del museo, del club cultural: Yes, I was there in 2012... I fucked Cuba the grand whore before she tried to become a little lady. And man, she was expensive, but hell, she was well worth it... 

Por eso lo entiendo tan bien, aunque me duela. Yo que no fui a Cuba en ningún año de mi rabioso deseo por ella, esperando en mi delirante celibato que cambiara para hacerla mía. Yo que la he respetado en la distancia con mojigatería y devoción de enamorada casi virgen y me he negado a aprovecharme de su condición de puta a la venta, entiendo por qué en el año antes del casi-cambio a la vuelta de la esquina, todos hacen cola por cogerle ese maravilloso culo prohibido. Sí, aunque me duela, yo lo entiendo... yo que soy la gran voyeur, maestra de la paja seca y en silencio, a la espera de la explosión del orgasmo del año del cambio cubano, hoy, como lo fueran los años 1959, 1978, 1980, 1994, 2006...