de vez en cuando me paseo por facebook a chismear, a ver fotos y otras tonterías de gente que conozco, más o menos. voy al "amistadio", como le llamo, a hacer de voyeur porque eso es lo que es, un lugar público, un estadio donde la gente exhibe su popularidad en términos de ¿amistades? acumuladas.yo, desgraciada que soy, sólo cuento con unos 16 conocidos en mi cuenta de FB (cierto, mucha gente que me conoce ha tratado de invitarme y no entiende por qué no utilizo mi nombre para mi cuenta de FB o para el blog. les contesto que así puedo ser un personaje que mucho tiene que ver con la persona que soy, pero no con el nombre que carga con las culpas de esa persona. muchos reaccionan que no quieren asociarse con el personaje y basta. respeto su decisión. total, cuando los veo, me siguen queriendo igual...). a pesar de eso, he decidido no solicitar más FB membrecías de las que ya tengo porque la verdad, me parece absurdo eso de ir pidiendo a la gente si quieren o no ser mis amigos, a estas alturas del juego. no soy una persona sumamente social en el sentido popular de la palabra. lo puedo ser si así lo decido, pero me gusta la soledad del individuo y no necesito el eco del aplauso del estadio para reafirmarme como nada de nada.
sin embargo, no niego que los ciberclubes sociales tengan su propósito en nuestra época y que la gente se divierta en ellos. soy miembro de FB, sí, pero en realidad sólo me incluí para no quedarme rezagada en esta era de tecnologías varias, admito. de vez en cuando también subo fotos a flickr que comparto con amistades. es un servicio que ahorra tiempo y por lo tanto me gusta: tiene un uso práctico. además, tengo un blog y es una actividad que me encanta. mi blog es muy personal, sin ningún otro propósito que escribir lo que me da la gana y de la manera que yo quiera, compartir música y arte que me gusta y vociferar de cuba y sus problemones a mi antojo. mi blog es, digamos, mi propio espacio donde patalear, perretear y lloriquear como a mi me plazca, mi A Room of One's Own (Virginia Woolf, 1929: "A woman must have money and a room of her own if she is to write fiction.") La pobre Virginia, quién la viera hoy en día, alarmada entre sus cuatro paredes, con tanta "escritora" suelta por ahí, en el ciberespacio, y la mayoría sin un $... ni un libro que verifique tal empeño, pero sí con muchos amigos en facebook... pero bueno, a través de este espacio, mi blog, he conocido personas desconocidas muy chéveres. algunas podrían tal vez llegar a ser amigos. en realidad, muy pocos de mis amigos de "la vida real" leen mi blog, tal vez porque ni saben que lo tengo porque no se lo comuniqué a muchos, la verdad. pero otro tanto de desconocidos lo leen de vez en cuando. who knew, como dicen por ahí.
pero al grano. lo cierto es que yo sé quiénes son mis amigos verdaderos y no necesito contar con 2,000 amistades en el amistadio de FB para sentirme verdaderamente realizada y confirmada como popular. traigo esto a colación porque la amistad es, para mí, una de mis pocas vacas sagradas, porque lo demás es rebaño que va directo al matadero. la amistad es una religión en la que hay que creer y en la que hay que dar pruebas constantemente. nada de dioses invisibles y promesas del más allá en esta religión. la amistad es mi "do IT and do it NOW". al igual que otras indispensables relaciones humanas, si se deja de cuidar, la verdadera amistad pierde el magnífico chisporrotear de la leña pesada cundida de fuego, encendida de ideas. se queda en cenizas.
yo soy una persona muy abierta, muy comunicadora, a pesar de no ser muy social. paradoja, pero tiene sentido. siempre digo lo que siento, sea lo que sea y en muchos casos, en momentos inapropiados. poco tacto, dicen muchos que tengo. pero prefiero decir las cosas tal y como las veo que guardármelas y añejarlas. no señor, no tengo botón de "save as a draft" en mi mente, como diría alguien muy importante para mí que no entiende por qué soy tan irreprimible. se lo traté de explicar: "si me lo trago, me quema. tengo que escupir la llama o me calcino por dentro". no lo entendió, ni ayer, ni hoy ni nunca, ella a quien considero tanto y quien me considera... pues, la verdad, una incontrolable bocazas. pero ella nunca me ha fallado y yo a ella tampoco, aunque nos hayamos dicho hasta de qué mal nos vamos a morir ambas. en mi librito negro, su nombre nunca se ha borrado. tachado tal vez, varias veces, pero nunca borrado.
entonces, me considero afortunada porque creo que cuento con unos 20 buenos amigos, de los cuales tal vez 10 sean muy buenos amigos y de ellos cinco son mis mejores amigos. contar con esos 20, 10 y sobretodo con los cinco de emergencia me hace una de las personas más dichosas del mundo. sí, muy afortunada. de esos cinco de emergencia, dos son hombres y tres mujeres. excelente equilibrio, pienso. siempre me gustaron los hombres como amigos. tienden a pensar de un modo linear, directo. nada de las curvas y tergiversaciones de las mujeres. ésas que tanto me gustan en los números redondeados, con curvas...5, 2, 3. otra paradoja. mis cinco amigos estrellas pueden contar conmigo a cualquier hora del día. los otros cinco durante la noche si fuera necesario, y los otros diez de día solamente y tal vez los fines de semana... pero siempre de la misma manera que yo cuento con ellos.
y bueno, lo más curioso es que muy pocos de ellos están en mi casilla del amistadio de facebook.
UPDATE: y vean este video, FaceBook en la vida real, que pusieron en FB unos argentinos, que está para divertirse de lo lindo
DEL LIBRO "FACEBOOM" del autor JUAN FAERMAN