
pero si queremos ser cientiespecíficos, y no poéticos ni creativos con los datos y los hechos, un meteorito es un meteoroide, fragmento celestial que penetra zona aérea antes foránea por terrestre, se enciende y chisporrotea hermoso y fugaz, posa para las cámaras y lentes lentejuelas hasta que alcanza la superficie anhelada sin que se haya vaporizado completamente. de nuevo, no sabe desintegrarse solo. necesita chocar. fulminante. y qué importa el cráter. y nunca se evapora del todo. lo recogen los que se atreven y dicen tener sabiduría para manejarlos. y luego lo analizan, a ver qué trae. lo traquetean. aahh lo fotografían. clic clic clic. a veces hasta terminan en museos. encapsulados. el vidrio y su reflejo espejo. el meteorito se queda quieto. ya dejó toda su energía en la trayectoria, la penetración, el choque. sin embargo sus partículas contienen tanta pero tanta información. y pudiera ser hasta benéfico para la humanidad a punto de extinción. pero los meteoritos son así. quieren ser estrellas y quedan en divas fragmentadas. aahh y qué importa el cráter. una y otra vez. luminosos y hermosos, efectos especiales. filmceluloide. captado todo para desintegrarse al fin. polvo que basurilla celestial. puf y paf. fuácata.